El
antiguo Nurburgring, el infierno verde, el circuito más duro y difícil del
mundo. Toda una seña de identidad en la que hoy muchos pagan por dar aunque sea
una vuelta con su vehículo de calle, un trazado donde cada año se celebran unas
prestigiosas 24 horas en las que la conducción nocturna tiene que ser
complicada y a la vez llena de adrenalina. El castillo en lo alto de su montaña
ha sido testigo de múltiples carreras a la vez que fallecimientos o accidentes
graves. Y eso es lo que toca narrar hoy primero de agosto, día en que se
cumplen 38 años de la cuasi fatalidad de Niki Lauda, momento en que perdió gran
parte de su cabellera dando inicio a las cicatrices que hoy hacen del austriaco
una seña de identidad. Heridas de guerra o gafes del oficio preferiría llamarlo
él.
En
aquel 1 de agosto de 1976, la disputa entre Niki Lauda y James Hunt por el
título estaba en todo lo alto llegando la competición a este trazado. Había
llovido y los pilotos dudaban sobre si se debía o no dar la salida. Al final
fue un sí y aunque únicamente finalizaran la prueba seis coches con triunfo
para James Hunt, todo quedó marcado por el accidente de Niki Lauda.
Tras una primera vuelta sin incidentes, llegaba la segunda donde el Ferrari del Austriaco patinaba, perdía el control y acababa contra las barreras incendiándose el monoplaza. Otro piloto impacta con el vehículo en llamas. Cinco espectadores, un policía y los pilotos Brett Lunger, Arturo Merzario, Guy Edwards y Harald Ertl se erigieron como grandes héroes para extraer a Niki Lauda de ese infierno de más de 800 grados al que estaba sometido. Caco destrozado, quemaduras de primer grado en varias partes de su cuerpo, algunos huesos rotos y los pulmones envenenados por la inhalación de gases tóxicos encendieron las peores alarmas, llegando incluso a recibir la extremaunción.
Tras una primera vuelta sin incidentes, llegaba la segunda donde el Ferrari del Austriaco patinaba, perdía el control y acababa contra las barreras incendiándose el monoplaza. Otro piloto impacta con el vehículo en llamas. Cinco espectadores, un policía y los pilotos Brett Lunger, Arturo Merzario, Guy Edwards y Harald Ertl se erigieron como grandes héroes para extraer a Niki Lauda de ese infierno de más de 800 grados al que estaba sometido. Caco destrozado, quemaduras de primer grado en varias partes de su cuerpo, algunos huesos rotos y los pulmones envenenados por la inhalación de gases tóxicos encendieron las peores alarmas, llegando incluso a recibir la extremaunción.
Con
este panorama, cualquier otro piloto habría colgado el casco o como mínimo no
habría vuelto hasta el año siguiente, pero en ese aspecto la historia de Niki
Lauda era la de alguien que parecía no temerle a nada y 42 días después con
muchos médicos desaconsejándole que lo hiciera, se subió de nuevo al Ferrari en
Monza para no regalar el título a James Hunt. Acabó en una muy meritoria cuarta
plaza bajándose del coche con los vendajes empapados en sangre. Él mismo ha
reconocido muchos años más tarde sentir miedo por la posibilidad de sufrir otro
accidente en aquel fin de semana, aunque las alabanzas se tornaron en críticas
con motivo del Gran Premio de Japón que se disputaba en Fuji. Última prueba del
mundial y el título en juego. Tras pocas vueltas y ante un torrencial aguacero,
Niki Lauda decide abandonar ante la inseguridad que proporcionaban tales
condiciones meteorológicas cediendo el campeonato al de Mclaren por un solo
punto. Carlos Castella en su blog y analizando la película de “Rush”, nos
arrojó el dato de que hubo un pacto por parte de los pilotos de abandonar a las
pocas vueltas y pocos lo cumplieron. Uno de ellos fue Niki Lauda.
Se que eres forista de Pedro, hace muchos años abrí en foropedro un hilo sobre esto que no tuvo apenas seguimiento.
ResponderEliminarYo "viví" ese accdidente, ya era fan de Niki, recuerdo las imagenes del accidente "en directo", no estoy seguro de que por TVE retransmitiesen el GP en vivo pero sí de que las dieron en el telediario del mediodía.
No soy un experto sobre el tema pero sí he leído de muchas fuentes y te puedo asegurar que lo del miedo es cierto: Lauda reconoció que levantaba el pie en la curva Grande de Monza el viernes durante los libres.
Claudio.
Gracias por tu comentario compi pedrista :).
EliminarAlgunos no habíamos llegado al mundo en los tiempos de Niki Lauda así que hemos investigado sobre su figura a través de escritos, vídeos,etc. Y aunque su carácter siempre haya sido un tanto controvertido y polémico, como piloto creo que perfectamente está dentro del top 5 histórico. Además, la película "Rush" creo que mejora aun más si cabe su imagen como piloto cuando a los más jóvenes seguidores se les da a conocer lo que hizo tras su accidente al subirse al coche poco más de un mes después. Y también dicho sea de paso, hay un adelantamiento suyo en Mónaco ya con Mclaren al que no se le da históricamente mucha importancia pero es bajo mi opinión un adelantamiento de valor y "bemoles". Hablo de uno que hizo pasada la curva de Santa Devota y subiendo hacia el casino. En resumen, que no sólo era un piloto con calidad, sino que era agresivo y muy ambicioso. Creo que si podemos asemejarlo a alguno de hoy en día lo haría con Lewis Hamilton.
Un saludo.