sábado, 4 de noviembre de 2017

Brasil queda huérfana de pilotos

Felipe Massa ha anunciado su retirada a final de 2017 a través de un vídeo en las redes sociales. En la imagen, el baño de “Massas” que se dio en Brasil al oficializar su primer adios (FORMULA 1)

Segunda retirada de Felipe Massa de la Fórmula 1 y esta vez sí, parece la definitiva. El pasado año ya la anunció, pero los acontecimientos se precipitaron con la retirada de Rosberg, el fichaje de Bottas por Mercedes y la poca fiabilidad que ofrecía Stroll como novato. Por lo que desde Williams le convencieron para volver a coger el casco, puesto que necesitaban unas manos expertas al volante.

En estos momentos, se puede decir que a la vista de los responsables de Grove, la formación y la adaptación del canadiense ha finalizado. Los nombres que suenan para sustituir a Felipe son una incógnita. Tal vez la apuesta más segura sea la de Paul Di Resta tras dos años como probador y conocedor de la estructura, dado que nadie sabe lo que será capaz de hacer Kubica si regresa tras más de seis años ausente y con su brazo maltrecho, y desde luego Kvyat si firma puede resurgir, aunque sus dos últimos años no están marcados por la meritocracia.


Dicho esto, habría que buscar mucho en las hemerotecas para ver en qué año Brasil no tuvo piloto alguno en la parrilla.  Es más, concretando, desde el mundial de la temporada 1968 Brasil siempre había tenido al menos algún representante en la parrilla. Pero el dolor de la pérdida del último bastión paulista se suma a que nada viene por detrás, puesto que en Fórmula 2 tampoco hay ningún piloto que compita bajo la “Verde Amarelha” y únicamente cabe la remota posibilidad de que Pietro Fittipaldi, nieto del legendario Emerson Fittipaldi coja el testigo si consigue vencer en unas World Series que pierden prestigio a pasos agigantados desde la salida de Renault. Por lo que con la despedida de aquel que no ganó el mundial 2008 por una curva en Interlagos queda en Brasil un vacío complicado de llenar, una ausencia que hacen ver lejanos los tiempos en los que dominaban con Senna, Fittipaldi, Piquet, Carlos Pace… 

martes, 31 de octubre de 2017

Un toque que pone punto y final al campeonato

La colisión entre Vettel y Hamilton obligó a ambos a pasar por boxes, facilitándole el título matemático al piloto de Mercedes (www.gpudpate.net)

A priori, asegurar el título en México a Lewis Hamilton no debía ser una tarea excesivamente compleja. Un triunfo de Vettel le obligaba a ser como máximo quinto y un podio del teutón le haría ser noveno para certificar lo que se veía claro desde hace varias pruebas. Concretamente desde que Ferrari empezó a arruinarse el mundial así misma en Singapur sin opción a que en Abu Dhabi se decidiera todo.

Hamilton este año no solo puede presumir de cuatro cetro. Es en 2017 cuando de verdad ha escrito su nombre en las páginas más brillantes de este deporte. Cuatro mundiales están únicamente al alcance de pilotos considerados como leyendas y además lo ha hecho con el récord absoluto de poles, ese que poseía Michael Schumacher y parecía imbatible, ese que antaño fue para Ayrton Senna y del mismo modo se tornaba en intocable en sus tiempos.

Hamilton quizás planeaba un fin de semana más conservador, de calculadora pura y dura a la par de no excederse en ello como le pasó en Brasil 2008. Lo cierto es que con el toque, lejos de pensar en que su carrera se arruinaba, sabía que el título era suyo al manejar la información de la parada de “Seb”. Hamilton era libre, libre de hacer lo que más le gustaba, que era poner pedal a fondo y adelantar al límite que es lo que le divierte y apasiona realmente a “Hammertime”.

Al final, Hamilton cumplió con su novena plaza y se proclama campeón en una prueba en la que se impuso nuevamente Max Verstappen bajo el talismán casual que está suponiendo para él que sus victorias coincidan con ceses de Daniil Kvyat. Y es que Max fue el gran beneficiado del batiburrillo de la arrancada entre Vettel y Hamilton. “A río revuelto ganancia de pescadores dice el refrán”. Y ha sido realidad pura y dura cuando tres en paralelo nunca tienen cabida en la curva. Sin duda, si Red Bull sigue en esta progresión, Verstappen apunta a título en 2018.  

miércoles, 25 de octubre de 2017

A falta de la rúbrica


Lewis Hamilton celebró junto al plusmarquista Usain Bolt el triunfo que da el campeonato de constructores a Mercedes y le pone a tiro de piedra el de pilotos

Mercedes ya ha añadido a su palmarés otro título más de constructores. Sin duda, es el equipo dominador de la era híbrida, el que marca diferencias, el que parece estar pasando por un legado que no tendrá fin alguno. Pero si Mercedes ya ha estampado su firma, poco le queda a Lewis Hamilton para hacerlo.  Le basta con hacer un quinto en México para levantar su cuarta corona.
Vettel le robó la cartera en la salida, y aunque Hamilton tenía mucho más ritmo, esperaba en él a alguien más conservador, a alguien que no intentaría el adelantamiento en pista para no arriesgar el botín que tenía en el bolsillo y trataría de ganar la carrera por estrategia. Puesto que si hay alguien que tenía que asumir los riesgos, ese era “Seb”. Y nada más lejos de la realidad, Hamilton nos ha demostrado en innumerables ocasiones que cuando se pone el casco, se olvida de la tabla clasificatoria y que es un inconformista que un segundo no le vale, quería ganar y encima quería hacerlo con brillantez, trabajándose un adelantamiento.

De ahí en adelante, monólogo de “Hammertime” y nuevo espectáculo en forma de remontada de Max Verstappen. Sin necesidad de ir a estrategia cambiada, llegó a la altura de podio y en una última vuelta épica, consiguió el adelantamiento de la polémica, ese que le encumbraba y a la vez le hundía en forma de sanción al interpretar la FIA que excedió la pista para hacerlo. Horas después de la carrera, aún sigue coleando ese debate y probablemente es de esas maniobras que hay que verlas miles de veces, analizarla al detalle y juzgarla como es debido.
Un poco más atrás, vemos a un Bottas perdiendo fuelle desde que se confirmó su continuidad en Mercedes. Ya no es aquel Bottas que complementaba el trabajo de Hamilton y si ha podido salvar algo más es gracias a la avería mecánica de Ricciardo cuando en estrategia ya le tenía ganada la posición.

También protagonista este fin de semana ha sido Carlos Sainz Jr en su debut con Renault. Séptimo y luchando por un sexto con Ocon demostrando más en una carrera que Jolyon Palmer en todo 2017. Las comparaciones con Hulkenberg no proceden ya que el alemán no ha tenido un buen fin de semana y probablemente su sanción en calificación le hizo no forzar en ese aspecto. Por lo que el duelo real tiene que llegar en su primer Round en el Hermanos Rodríguez.

También debutante era Brendon Hartley pero en condiciones más complejas. Suplía a un Pierre Gasly que optaba por ir a Japón a bregar por el título de la Superformula. El tifón suspendió la prueba y al final ni cetro ni Fórmula 1. Por lo que el bueno de Brendon, confirmado también para suelo Mexicano en detrimento de Kvyat, proseguirá su adaptación. 

jueves, 19 de octubre de 2017

Una renovación con mente en otras categorías

Fernando Alonso ha prolongado su relación contractual un año más con Mclaren atraído por competir a muy corto plazo en otras disciplinas (Clive Close AFP)

Finalmente la decisión de Fernando Alonso se ha conocido después de tan larga espera. A tan solo cuatro carreras, y con Honda fuera de la órbita de Mclaren, el asturiano ha decidido aceptar la oferta de renovación tras pulir todos los flecos que le faltaban en Woking.

A simple vista, Fernando Alonso dará otra oportunidad más a Mclaren en lo que parece ser el enésimo proyecto a largo plazo. Puesto que la lógica dice que el primer año de Renault como motorizador, aún mejorando las prestaciones ofrecidas por Honda –cosa no muy compleja- no estará para pelear adelante. Muchos progresos habrían de conseguir si pretenden acercarse a Red Bull o Ferrari.

Por otro lado, no es de extrañar que lo que más ofrece Mclaren a Alonso es flexibilidad a fin de retenerle, una flexibilidad que choca y mucho con la rigidez de los tiempos de Ron Dennis. Económicamente Alonso seguirá siendo uno de los mejores pagados sino el mejor, pero en el plano deportivo pesa más el hecho de que Fernando pueda compaginar otras categorías, dado que nunca ha ocultado su obsesión por ganar la famosa triple corona únicamente en manos de Graham Hill.
Para 2018, Fernando Alonso parece ha descartado por completo Indianápolis a fin de centrarse en la Fórmula 1 en ese tramo de la temporada, pero valora otras opciones de manera muy seria. Como son probar suerte en las 24 horas de Daytona como preparativo de cara a las legendarias 24 horas de Le Mans. Dicho esto, aún no han sonado posibles equipos para que el bicampeón pruebe fortuna, pero a buen seguro que no le costará en demasía encontrar volante en otras competiciones.


En resumidas cuentas. Fernando Alonso ha renovado por una única temporada y pensando no solo en usar su última bala en la recámara si quiere volver a ser campeón. Sino que también barrunta más allá de su retiro en la Fórmula 1 como vemos.

jueves, 12 de octubre de 2017

Mónaco ya tiene su príncipe


A Charles Leclerc le aguarda un gran futuro tras proclamarse campeón de GP3 en 2016  y de Fórmula 2 en 2017 (FOTO:www.motorsport.com)

No, no hablamos ni de las seis victorias de Ayrton Senna en Mónaco y ni mucho menos del príncipe Alberto de Mónaco. Hoy toca analizar al piloto local, a ese nuevo talento en ciernes que ha sido campeón de la Fórmula 2 en Jerez y ya mira con todo su arsenal a la Fórmula 1.

Jerez no ha sido más que el colofón a lo que se llevaba barruntando desde que la Fórmula 2 se inició en Bahrein. Poco dejaba Charles Leclerc a los demás en clasificación. Únicamente Oliver Rowland y Nobuharu Matshushita consiguieron apartarle alguna vez del más privilegiado de los lugares para partir en la prueba.  Ocho de diez en poles son números para temblar
Hay que echar la vista muy atrás para ver a alguien imponerse con tal autoridad en la categoría, y más siendo el año de su debut. Sí, hablo de los tiempos donde Lewis Hamilton empezaba a forjar su leyenda y su sitio en Mclaren, hablo de compararle con ese piloto que a día de hoy está a punto de ser tetracampeón y que ha batido registros de Ayrton Senna y Michael Schumacher.  Y sí, en el pilotaje no se parecerán en demasía.  Hamilton era agresivo, se lanzaba nada más ver el hueco y metía el Art Grand Prix por donde parecía no haber espacios. Leclerc en cambio es más pausado y más frío, de ritmos más constantes y eso le eclipsaba más los domingos en las pruebas de parrilla invertida.

En el año de su estreno, y empalmando cetros de GP3 y Fórmula 2, Leclerc ha barrido a otros más veteranos como Rowland, Markelov y ni qué decir la diferencia abismal con los Canamasas o Cecotto, que aún falta comprensión para saber qué siguen haciendo ahí después de una década. Y no sólo eso, sino que ha asestado un durísimo golpe moral a su compañero tanto de la Ferrari Driver Academy como de Prema Powerteam, Antonio Fuoco.

Sólo las dos citas de Abu Dhabi separan a Leclerc de poder pensar en el futuro, en una Fórmula 1 en la que en su más que probable debut en 2018 suena fuertemente para firmar por Sauber. Una gran cesión de Ferrari a fin de foguear a su nueva gran perla a la vez que probará en los restantes libres de los viernes para el equipo suizo.

domingo, 8 de octubre de 2017

Alonso y Massa le dan la carrera a Hamilton, Ferrari le regala el mundial


Sebastian Vettel se muestra extremadamente serio a sabiendas de que con este abandono, dice adiós a casi todas sus opciones de título (FOTO:Lars Baron/GETTY IMAGES)

Desde Maranello tienen dos opciones, o abrir una línea de investigación para ver si alguien le ha lanzado un vudú o directamente ver qué está ocurriendo. Desde el principio, se veía que Vettel no tenía ritmo, perdía posiciones hasta que desde el box decidían retirar su coche. La causa es una bujía, una de esas piezas nada caras que ya a De la Rosa le costó el podio en Austria allá por el año 2000 con el modesto Arrows, y que ahora deja de manera cuasi definitiva sin mundial a “Seb”.

La situación a día de hoy es la siguiente. Queda cuatro carreras y Hamilton las puede realizar con la calculadora en la mano, sin forzar en ninguna de ellas si así lo desea. Porque ya en Austin dentro de quince días puede salir campeón si vence y Vettel no puede superar la sexta plaza. Con lo cual el epílogo del mundial 2017 está escrito a falta de la firma de su autor.  Hasta el propio Vettel lo admite a pesar de que es uno de esos depredadores que no sueltan a su presa. “¿Se me va el mundial? No hay que ser un genio para verlo” decía después del abandono. Así que la pregunta es, ¿en qué circuito se certificará lo que es ya una certeza?


La carrera en sí volvió a ser un tira y afloja entre Hamilton y Max Verstappen. Red Bull ha encontrado ritmo en carrera y eso le está llevando a hacer un final de campeonato fuerte, con disposición a subirse a lo más alto del cajón. Mediada la misma, desde el box de Mercedes las cuentas no eran nada claras y Bottas a falta de parar y verse lastrado al principio por los Force India, debía hacer de escudero. Es poco entendible que metieran al finlandés a cambiar gomas cuando aún Max no le había superado ni estaba en condiciones de hacerlo. Podía haberse dejado el holandés mucho más tiempo tras él si le hubieran mantenido en pista consiguiendo así que Hamilton se llevara una victoria cómoda. Cosa que a la postre no fue así. Desconocemos si la fiabilidad de ese bólido 44 empezaba a resentirse o el segundo juego de neumáticos decía basta, lo cierto es que el Red Bull de Verstappen se había echado encima y ni siquiera el Safety Car Virtual por el pinchazo de Stroll le había facilitado las cosas. Max estaba dispuesto a atacar hasta que en el último giro llegaron a la altura de Fernando Alonso y Felipe Massa en su brega por el último punto. El juego de los egoísmos se ponía sobre la mesa y eso se tornó en contra de Verstappen, cuando ni Alonso por segundo Gran Premio consecutivo ni Felipe Massa respetaron las banderas azules

domingo, 1 de octubre de 2017

Max Verstappen se impone a un Hamilton de calculadora

Segunda vez en la vida de Max Verstappen que sube a lo más alto del cajón del Gran Circo, todo en una prueba en la que los Red Bull tuvieron un ritmo muy competitivo (FOTO:www.thesun.co.uk)

Los planetas se habían alineado de nuevo a favor de Mercedes. Vettel partía último y por mucho que hiciera quedaba sin opciones salvo que la lluvia o una locura de carrera le encumbrara hacia la victoria o en su defecto arruinaran a Hamilton. Otra prueba más que era propicia para Ferrari y otra vez más que se quedan sin poder pelear, aunque en esta ocasión sea por infortunio y no por graves meteduras de pata.

Verstappen acosó desde el principio a Hamilton hasta rebasarle. Todo parecía estrategia y teatro para Mercedes esperando al golpe final, pero nada más lejos de la realidad. En el equipo de Hinwill les costaba encontrar el ritmo y Verstappen se marchaba, era hora de no forzar para las balas plateadas, de mantener mecánicas a salvo y amarrar unos puntos que les acercan más a otro cetro mundial. Un segundo era bueno, no había que asumir riesgos y así lo hizo Lewis Hamilton.
El nuevo ídolo de los países bajos ganó, y como dato curioso, consigue la victoria cada vez que Daniil Kvyat es bajado del monoplaza. Lejos de eso, Vandoorne y Pérez luchaban en una gran carrera para ambos por ser el primer “mortal” en pista mientras que Vettel venía remontando, apostando por el compuesto superblando en estrategia cambiada para asaltar a Ricciardo, que parecía que tendría problemas para retener a Vettel cuando éste llegara a su altura y en verdad lo único que hizo fue enseñarle la zanahoria, aguantar neumático y dejarle tirado en las últimas vueltas asegurando así su tercer lugar.


Lejos de esas posiciones pudimos ver una prueba dentro de los parámetros normales. El citado Vandoorne no se corta al empezar a discutir la hegemonía de Alonso en Mclaren, Gasly tuvo un debut correcto sin sufrir los problemas de fiabilidad de Sainz Jr mientras que Magnussen se reivindica como un piloto duro y agresivo.  Lejos quedaba la tapa de alcantarilla que en los Libres 1 del viernes cortaba el neumático de Grosjean y nos asustaba a todos. 

martes, 26 de septiembre de 2017

Daniil Kvyat, última víctima de la trituradora

Tras ascender al primer equipo de Red Bull y descender de nuevo al filial en detrimento de Max Verstappen, la mala campaña del ruso ha forzado su cese en detrimento de Pierre Gasly.

Del cielo al infierno, así es la vida en la Fórmula 1 de Daniil Kvyat. De ser tomado en cuenta para el primer equipo en sustitución de Sebastian Vettel a ser una víctima más de la cantera más poderosa y controvertida del gran circo, donde otros como Vergne, Da Costa Alguersuari, Ammermuller, etc se vieron succionados de la noche a la mañana sin comerlo ni beberlo.

Pocos se acordarán de los dos podios de Daniil en la Fórmula 1, y aunque no sea un piloto de los grandes, sí que ha ido demostrando cosas cuando la presión menguaba sobre él. De hecho, fue campeón de GP3 y demostró en esa categoría más tablas que su actual compañero Carlos Sainz Jr, ese mismo que hoy suma 48 puntos por tan solo 4 del ruso.

Kvyat podía ser rápido, pero se ha visto desbordado por la presión. Nos atreveríamos a decir que jamás se repuso del varapalo de 2016 cuando fue descendido a Toro Rosso para subir a Max Verstappen. Los accidentes en las dos últimas carreras probablemente no fueron más que el detonante para el ascenso de su nueva perla y protegido, simplemente llegó el pretexto perfecto que Red Bull esperaba a fin de tomar una decisión cantada.

Aunque duela decirlo, la carrera del ruso en la Fórmula 1 parece tocar a su fin con tan solo 23 años en una puñalada que le impide buscar otro volante con las escuderías casi cerradas de cara a 2018. Tal vez considere ser probador a sabiendas de que su número de kilómetros en pista será reducido, o tal vez decida emprender la aventura de Buemi en la Fórmula E en busca del talento perdido.


La otra cara de la moneda es la de Pierre Gasly. El galo ya había dejado caer que podía acabar la temporada como titular en Faenza, pero los rumores no apuntaban a la dirección del despido de Kvyat, sino que tomaban giro hacia un posible debut prematuro de Carlos Sainz Jr con Renault a sabiendas de que los del rombo les cuesta aguantar a Palmer aunque éste finalice su vínculo a finales de 2018. Y es que Gasly ha sido campeón de GP2 en 2016 después de dos temporadas y media y también existen comparativas del pasado con Sainz Jr. En World Series el francés fue subcampeón superado por el madrileño. Por lo que tendrá que hacerse valer en su estreno y dejar patente que su actual segundo puesto en la general de la Superformula de Japón no es casual. 

domingo, 17 de septiembre de 2017

Ferrari tira a la basura medio campeonato



El fallo garrafal de Ferrari en la salida del Gran Premio de Singapur, con choque entre sus dos monoplazas, puede costarles muy caro

Lo peor que le podía ocurrir a Ferrari le ha ocurrido. A Mercedes nunca se le ha dado bien Singapur y en general es un equipo que cojea en circuitos de más chasis que potencia. Vettel partía desde la pole y el primer bólido plateado estaba en tercera línea. La situación era idónea para que el teutón recuperara el liderato perdido hace quince días y hasta desde Mercedes admitían estar en clara inferioridad en el trazado nocturno.

La primera carrera nocturna con lluvia de la historia estaba a punto de arrancar, eso daba una oportunidad a los de Brackley pero ni en sus mejores sueños pensaban que ocurriría lo que ocurrió. Vettel arranca mal y gira a fin de defender su posición, Raikkonen no calcula bien las distancias y choca con Verstappen haciendo el perfecto juego de bolos con el mismo Max, Alonso y su compañero de equipo Vettel en lo que puede ser el Gran Premio de las oportunidades perdidas. Todo lo que Raikkonen había podido dar a Ferrari este año se lo quitaba de un plumazo transformando el cuento de Hadas en el Thriller de Psicosis que se emitiría en Maranello.  

Pasado el galimatías, Hamilton no podía ni creerse que la victoria estaba en su bolsillo, que con enseñar la zanahoria a Ricciardo valía, y que en un circuito de los denominados Ferrari iban a salir estos últimos con un cero perdiendo medio mundial.

La pista se secaba muy poco a poco, e igual que Hamilton no asumía riesgos, Renault también echaba al vacío sus opciones de podio con una estrategia que rayaba lo incomprensible. Mientras tanto, Carlos Sainz Jr se convertía en uno de los héroes del día finalizando cuarto, aguantando los envites de Sergio Pérez para ser el primero de los mortales, y en su cabeza rondará el pensamiento de que una avería de los galácticos le habría catapultado a ser el cuarto español en subir a un podio de F1 tras Alfonso de Portago, Fernando Alonso y Pedro de la Rosa.


Para cerrar, es de justicia dar al Cesar lo que es del Cesar. Y si hace unas semanas vertíamos críticas feroces contra la FIA y Charlie Whiting por su forma de gestionar las carreras, hoy lo han hecho todo de diez. Nos han dado una carrera en lluvia, con salida en parado y sabiendo perfectamente cuando había que sacar a pista el Safety Car y cuando retirarlo. Ha prevalecido su criterio sobre el egoísmo de muchos pilotos. 

viernes, 15 de septiembre de 2017

El fin a una unión llena de espinas


Mclaren y Renault han llegado a un inhóspito acuerdo con carambola a tres bandas. Los de Woking ponen fin a una tortuosa aventura con Honda, que a partir de ahora motorizará a Toro Rosso mandando a Carlos Sainz jr al equipo oficial de Renault (FOTO:www.skysports.com)

Se acabó, confirmación de un divorcio que era secreto a voces. Mclaren y Honda separan sus caminos antes de lo previsto, y es que segundas partes nunca fueron buenas. De ser un binomio histórico que hizo triunfar a Senna y Prost a llevar a los de Woking al desastre absoluto, a ser una escudería mítica descendida a los infiernos donde campeones del mundo como Fernando Alonso o Jenson Button no fueron capaces de reconducir una situación desesperante.

Se terminó para todos el vía crucis que desde el principio no dio los resultados esperados. Cada comunicado de optimismo llegado desde Japón no era más que una cortina de humo, un hablar mucho pero trabajar poco en pos del éxito.

Desde el principio de esta unión, se vieron los despropósitos a cada cual peor desde Japón. No había potencia ni fiabilidad, y así era imposible competir para cualquier piloto que se subiera a ese carro. A Stoffel Vandoorne le ha venido bien como temporada de fogueo, pero no así para Fernando Alonso o Jenson Button, quienes sólo brillaban cuando los trazados eran angostos dejando al aire libre las carencias de un motor mediocre metido en un buen chasis que podrían haber dado buenos resultados. “Tengo un motor de GP2 dijo una vez el asturiano desesperado en radio”. A lo que podríamos responderle que al menos los motores de la GP2 (renombrada como Fórmula 2) no se rompen.

¿Qué deparará el futuro?

Con esta ruptura, Mclaren comenzará una nueva y extraña asociación con Renault a fin de que los galos les suministren propulsores. Red Bull no ha ejercido el derecho de veto y ahora es cuando empieza a funcionar el rompecabezas. Para Mclaren era Honda u Alonso, habían de decidir por una de las dos partes y se han inclinado por cotejar al asturiano a fin de mantenerle una temporada más en sus filas. Algo que aún se está pensando el bicampeón mundial, ya que sin la aportación económica de Honda, Fernando habría de renovar a la baja si quiere mantenerse en la Fórmula 1 a falta de opciones ganadoras, sus caminos son aceptar eso, marcharse a una Williams que a día de hoy tampoco puede ofrecer nada competitivo o poner punto y final a su estancia en la máxima categoría para valorar la Indy Car a tiempo completo o el WEC

Para no incumplir la normativa de suministrar motores a más de tres equipos, Renault abandonará Toro Rosso y ahí recalará Honda. Ahora, el propulsor del país del sol naciente suministrará a una escuadra que no le presionará, que no le exigirá lo mismo que una de las más laureadas ni se expone al ridículo de antaño de tener su propio equipo oficial. Perfecto para intentar continuar el desarrollo y de marchar las cosas por muy buen camino, puede salir ganando a la larga Red Bull e incluso ejercer su tanteo colocando a Matshushita en Toro Rosso como hombre de máxima confianza en Honda. Más leña al fuego ha llegado cuando se sabe que Red Bull no seguirá aliado con Renault a partir de 2019, por lo que su equipo filial se va a convertir más que nunca en el banco de pruebas que tanto les es necesario a fin de cerrar el trato con Honda para ambas escuadras.  


En este trato tan rocambolesco entra el nombre de Carlos Sainz Jr, que cumplirá su deseo de dejar la estructura de Red Bull y fichará por Renault como parte del acuerdo a tres bandas. El madrileño por fin podrá salir del letargo y de ese estancamiento al que el equipo austriaco le iba a someter en su equipo filial partiendo de esta manera a una escuadra con expectativas de futuro y que podría proporcionarle un monoplaza competitivo a medio plazo. 

domingo, 3 de septiembre de 2017

Lewis Hamilton se coloca líder en territorio hostil

Hamilton, silbado en el pódium, le ha robado el liderato del mundial a Vettel en su propia casa, donde Ferrari naufragó desde el sábado con la lluvia (FOTO:www.gpudate.net)

Tal vez empiece a ser preocupante para Ferrari que desde 2010 no puedan ofrecerle a los Tifossi una victoria en casa, en el templo de la velocidad. Pero que encima pierdan el liderato del mundial justo en este Gran Premio ha sido un golpe muy fuerte para los de Maranello.

Esta es la típica carrera que empezó a fraguarse el sábado. Fue crucial que con la lluvia y la mala gestión de Ferrari, el que Mercedes pusiera a Hamilton con la 69 pole de su carrera haciendo añicos el record que poseía Michael Schumacher ya era importante. Pero si encima conseguían colocar coches más lentos en seco como eran Stroll y Ocon detrás pues el 90% del trabajo estaba hecho. Todo se reducía a mantenerse líder en la salida y que la mecánica respondiera como así lo hizo. No había más historia, Vettel tenía que ir perdiendo tiempo con monoplazas más lentos a los que Raikkonen le era cuasi imposible superar y eso ya iba a ser crucial e insalvable. Cuando el teutón quiso reaccionar, la diferencia con las balas plateadas era casi de diez segundos y subiendo. Era inútil buscar otra estrategia, la carrera y la cabeza del mundial estaba perdida para ellos.

En estas, Vettel se conformaba con un podio que al final corrió mucho riesgo gracias a Daniel Ricciardo. Sí, el australiano otra vez anda por ahí sin hacer ruido, remontando a la chita callando y apostó por un superblando que propició que “Seb” tuviera que forzar para no ser cazado.
También hay que citar a los Stroll y Ocon que tanto lucieron el sábado. Como era de esperar, sus monoplazas no daban más y perderían posiciones. Aún así, el galo brilló con la sexta plaza y Stroll tuvo que protegerse de Felipe Massa al final.

Si Riccardo ha sido la cara de la moneda en Red Bull, la cruz una vez más se la lleva Max Verstappen. No es el año del holandés para nada y ahora un pinchazo por roce en el embudo de la salida le mandó al último lugar, teniendo que pelearse por los puntos. Al menos, adelantamiento tras adelantamiento, se habrá divertido.


Y por último, Mclaren ha estado mejor de lo que se esperaba en un circuito que no se ajustaba a sus virtudes. Monza era potencia contra un motor Honda que tiene en la misma su talón de Aquiles. Aún así, Stoffel Vandoorne estaba metido en la porfía por los puntos mostrando que la segunda mitad de temporada del belga está siendo para tenerla en cuenta. En cambio, Fernando Alonso bastante tuvo con su brega con Palmer antes de que ambos se vieran obligados a retirarse. 

sábado, 2 de septiembre de 2017

Charlie Whiting mata la belleza de la Fórmula 1

El director de carreras de la FIA, Charlie Whiting ha vuelto a estar en el ojo del huracán después de paralizar durante casi tres horas la calificación del Gran Premio de Italia por la lluvia (FOTO:www.fia.com)

Lo reconozco, no he podido ver la calificación completa del Gran Premio de Italia. Había obligaciones más importantes que cumplir más allá de las 15:30 hora española que observar a Charlie Whiting querer erigirse protagonista de todo con Bernd Maylander como conejillo de indias.

Hace poco menos de un año se hacía oficial que Chase Carey con Ross Brawn y compañía se hacían con los derechos de la Fórmula 1 que durante tantas décadas ostentado Bernie Ecclestone. Quizás a los nuevos mandamases no les guste tanto figurar ante las cámaras, pero esa revolución que tanto nos prometían de momento ha quedado en palabras, en un cambio para que nada cambie más allá de algún gesto bonito como el del niño fan de Raikkonen en Barcelona.
Muchas veces se ha producido la circunstancia de parar en lluvia y no reanudar hasta que el trazado estuviera para montar los neumáticos lisos humillando a Pirelli que aún no sé para que se machacan a hacer y probar los neumáticos de lluvia extrema. Pero Monza me hará estallar contra lo que he visto y contra el hacerme perder un valioso tiempo frente al televisor.

Recapitulemos. Caía mucha agua y Aquaplaning  de Romain Grosjean en plena recta. Sí, no lo neguemos, este fenómeno es una combinación de mala suerte y pequeño fallo de pilotaje al no saber buscar la trazada correcta en condiciones complicadas. Con esto no voy a aseverar que no haya que parar la carrera cuando la lluvia es torrencial haciendo la pista impracticable hasta con los neumáticos de extrema lluvia y con el helicóptero sin poder volar. Pero en este caso, aún al límite, y coincidiendo con Pedro de la Rosa, la cosa estaba para correr y Charlie Whiting vuelve a ser víctima de los pilotos y sus opiniones egoístas, ya que según intereses personales y profesionales, unos son partidarios de salir y otros no.


Ahora mismo me viene a la mente la mítica frase de la afamada serie “La que se avecina”. Ese “¿Qué somos, Leones o Huevones?”. Pues que se lo planteen esos pilotos que se amilanan cuando caen cuatro gotas y no quieren correr riesgo alguno, que se piensen si seguir en este deporte asumiendo lo que ello conlleva o si por el contrario se encontrarían más cómodos en su casa rodeados de los suyos al calor de una chimenea. Porque sí, la Fórmula 1 debe ser segura y se ha conseguido cuando vemos impactos fortísimos afortunadamente sin consecuencias. Pero también con condiciones de pista como las de hoy Ayrton Senna consiguió tres de sus grandes hazañas como su primer podio en Mónaco, su primera victoria en Estoril o su gesta de Donington Park. Así que señores pilotos que les da el tembleque cuando la lluvia aparece. No se atrevan a decirnos una vez más que quieren igualarse a las leyendas del pasado porque sólo con no echarle lo que no hay que echarle no le llegan ni a la suela de los zapatos a ellos.  Y esto también va para Charlie Whiting y los nuevos dueños del Gran Circo. Dejen de cargarse el espectáculo y dejen de privarnos de condiciones donde realmente se van a ver muchas grandes manos

domingo, 27 de agosto de 2017

Hamilton entra en la historia poniendo contra las cuerdas a Vettel


Sebastian Vettel pasó toda la carrera tras Hamilton en una situación desesperante para él ante la imposibilidad de darle caza (FOTO:www.caranddriver.es)

Spa es un clásico dentro del calendario. Pero este año se puede decir que ha sido el Gran Premio más emotivo de las últimas temporadas. Primero Mick Schumacher homenajeaba a su padre Michael subiéndose al Benetton con el que ganó su primer mundial en 1994, y posteriormente el propio Mick Schumacher ha visto como Lewis Hamilton igualaba el récord de poles de su progenitor alcanzando las 68. Sólo una separa al británico de ser el piloto con más poles de la historia de este deporte.

Pasada la calificación, la carrera ha tenido un férreo marcaje de Vettel a Hamilton durante toda la prueba. Un marcaje que de poco le ha servido al alemán que no acertó en los dos momentos clave. En la salida no consiguió superarle en el Radillon y luego tras el Safety Car, optando por una estrategia de ultrablando y tampoco pudo con Hamilton en la misma zona tras tirar el coche a un lado y a oro. A raíz de ahí la historia fue siempre la misma, el de Mercedes mantenía una ventaja entre el segundo y medio y los dos segundos, suficiente para enseñarle la zanahoria a Vettel y dejarle fuera de la zona de DRS.

Analizando también la carrera de “Seb”, sorprende que no intentara el undercut en un circuito tan largo e imitara la estrategia de Lewis. Su apuesta real fue tras irse el Safety Car y no le salió. Un Safety Car que es el fiel reflejo de la tensión que se vive en el box de Force India – cruce de declaraciones inclusive–  por los continuos toques entre Ocon y Pérez. Primero el galo se vio empujado contra el muro poniéndole el mexicano en serio peligro y la colisión en la segunda parte de carrera propició la aparición del mencionado coche de seguridad. Tras la jornada de hoy, todo son críticas contra “Checo”.

Tampoco deben estar las cosas precisamente calmadas dentro de Red Bull. Nuevo abandono de Verstappen por falta de fiabilidad y Ricciardo una vez más, en paso silencioso, ha salvado los muebles con un podio poniendo su calidad por encima del monoplaza que pilota.

En cuanto a otros equipos, mientras Williams sigue desapareciendo y en Renault han de confiarlo todo a Hulkenberg por las pobres actuaciones de Palmer, en Mclaren se repite la tensión y los problemas estallando por enésima vez Fernando Alonso contra los suyos.  Pérdida de potencia o no del propulsor Honda, parece que desde Japón llegan nuevas ventas de humo.  

martes, 22 de agosto de 2017

El declive de Fernando Alonso

Fernando Alonso ganó su último mundial en 2006 y desde su subcampeonato en 2013 no ha vuelto a saber lo que es luchar por lo más alto, llegando a sopesar su retirada de la máxima categoría (FOTO:www.rtve.es)

Si analizamos cada década de la Fórmula 1, aproximadamente en ese lapso de tiempo se producen los cambios generacionales de pilotos. Los Lauda, Fittipaldi, etc dieron paso en los 80 a los Prost, Senna y Piquet. En los 90 le llegó el turno a Michael Schumacher y la entrada del siglo XXI trajo los nombres de Alonso, Vettel y Hamilton para coger el testigo de El Kaiser.
Ya mencionábamos en otra entradalos pilotos que están llamados a pelear por los mundiales en la próxima década y que han de ser los que pongan punto y final a los grandes de la actualidad. Pero a día de hoy, y por mucho que les pese a los fans de Fernando Alonso en España, podemos definir al asturiano como alguien que puede conservar su calidad, pero no así su cache dentro de la parrilla.

Mclaren está por fin dando un pequeño salto con el motor Honda, pero no pinta que pueda ser suficiente de cara a pelear por el título mundial en 2018. Queda mucho por trabajar conjuntamente desde Woking y Japón si quieren colocar al equipo británico de nuevo en la cúspide. Mientras tanto, un Fernando Alonso cansado de ir abandono tras abandono, rotura tras rotura, avería tras avería, lentitud tras lentitud en recta, ha decidido tomar la estrategia de halagos a Ferrari meses atrás. Una estrategia que tenía la clara finalidad de intentar volver a vestirse de rojo. Precisamente en este momento le interesaba volver, ahora que observa que vuelven a ser competitivos, que pueden ser campeones nuevamente. Pero desde Maranello y concretamente Sergio Marchione cerraron las puertas al ovetense afirmando rotundamente que  ”no le interesa Fernando Alonso”. Y en términos similares se ha expresado Niki Lauda poniendo el cerrojazo a la puerta de Brackley ante su hipotética llegada.


A día de hoy, y como apertura de ojos para muchos, las grandes prefieren retener a sus pilotos antes que fichar al asturiano. En Ferrari ya han puesto el nuevo contrato en la mesa de Sebastian Vettel para que lo firme, únicamente la duración del mismo separa al teutón de proseguir con los del Cavallino. Y en caso de que saltara la bomba de la no continuidad bien podrían arriesgar con Leclerc como hiciera Mclaren con Hamilton en 2007. Un Hamilton que también se postula para seguir de color plateado con Bottas como fiel escudero sin necesidad de juntar dos gallos en el mismo corral. Todo esperando a que Ocon acabe su formación con Force India para dar el gran salto hacia Mercedes y de Red Bull podremos expresarnos en los mismos términos. Han logrado una de las parejas más estables de la parrilla. Ricciardo tiene cualidades para ser campeón y si consiguen un auto competitivo no les será difícil mantener a Verstappen durante más de una década con ellos. Así que la política de las tres grandes es sencilla, tienen sus asientos copados por pilotos que les aseguran todas las campañas poder luchar por el título y tienen cubiertas las espaldas de cara al futuro con sus jóvenes promesas. ¿Por qué fichar a un piloto de 36 años que ya cuenta los días para su retirada o cambio de disciplina?

lunes, 7 de agosto de 2017

Los futuros luchadores por el título

Charles Leclerc, al igual que hace en Fórmula 2, ha encabezado la tabla de tiempos en los ensayos post Gran Premio de Hungría (FOTO:www.Autosport.com)

Con Fernando Alonso habiendo cumplido recientemente los 36 años, Vettel y Hamilton abandonando la cifra de los patitos y los tests de rookies en Hungría, debemos pensar que el relevo generacional está muy próximo. Tanto es así que dos de los pilotos que están llamados a pelear en el futuro por ser campeones ya los tenemos plantando batalla sobre el asfalto. Sí, hablamos de Esteban Ocon y Max Verstappen. Dos viejos conocidos de categorías de base que se enfrentaron por última vez en Fórmula 3 con superioridad y cetro final para el piloto galo. Los caminos de estos dos bravos contendientes se separaron brevemente cuando Verstappen ascendía meteóricamente a la Fórmula 1 y Ocon volvía a ganar en GP3 antes de su breve paso por el DTM.

Ocon y Verstappen ya han demostrado de que pasta están hechos. El de Force India no ha parado de crecer desde que hiciera media temporada en Manor y fuera colocado por sus mentores de Mercedes en la escuadra de Vijay Mallya. Ahí ha conseguido que los máximos responsables olviden pronto la baja sensible de Nico hUlkenberg y se pueda pensar en el francés como el digno sucesor de Alain Prost si continúa en sus progresos. Por lo pronto, Pérez no se pasea ante él. 

Por otro lado, Verstappen es de esos que te hacen reencontrarte con la Fórmula 1 de antaño y del cuerpo a cuerpo, y a buen seguro habría dado muchos más titulares en los tiempos donde la tecnología no se imponía a las manos. Pero aún así, y “capado” por tanta electrónica, ya se ha mostrado agresivo tanto en defensa como en ataque, algo que suscita división de opiniones entre sus rivales. Lo cierto es que en Toro Rosso se impuso a Sainz y en Red Bull no le pone las cosas fáciles a Ricciardo.

No podemos olvidarnos ni mucho menos de Charles Leclerc. La Fórmula 2 está siendo su consagración. Es el hombre pole carrera tras carrera y nos podemos tirar a la piscina cuando aseveramos que desde tiempos de Hamilton hace una década no se veía a nadie con tal autoridad, aunque los domingos peque de conservadurismo y le cueste más tirar el monoplaza de Prema Powerteam contra sus rivales. Quizás, con cincuenta puntos de ventaja sobre Oliver Rowland en la general, se puede permitir el lujo de arriesgar menos y tomar la calculadora de cara a las pruebas al sprint.


Otro nombre que ha sonado con mucha fuerza en Hungría es el de Lando Norris. Un joven británico de 17 años apadrinado por Mclaren y que incluso bajó los tiempos logrados por Fernando Alonso. Quizás tenga razón Gerhard Berger cuando declaró que su depósito estaba vacío en la vuelta que ha dejado tantas columnas periodísticas. Aún así, sin la mayoría de edad y estrenándose en Fórmula 1 hay que tener muy en cuenta ese registro al igual que será menester seguir sus evoluciones en la Fórmula 3. Ahí marcha segundo a escasa distancia del regularísimo Maximilian Günther.  

miércoles, 2 de agosto de 2017

El papel del piloto reserva


Imagen de Paul Di Resta con Williams en Hungría supliendo a Felipe Massa (FOTO:www.thebestf1.com)

Sábado por la mañana en Hungría y finalización de los Libres 3. Felipe Massa se sintió indispuesto y Paul Di Resta fue requerido de urgencia para subirse al Williams. Hacía cuatro años que se separó del camino de Force India y sin comerlo ni beberlo se veía de nuevo compitiendo, viéndose obligado a quitarse el óxido a marchas forzadas, lanzado directamente a la calificación sin hacer ninguna sesión preparatoria.

En carrera no pudo finalizar y bastante papel hizo. Pero realmente, su actuación en Hungría debería reabrir el debate sobre el rol que actualmente desempeñan los pilotos reservas de las escuderías.
Hasta hace unos años, cuando alguien tenía que subirse a sustituir a otro piloto por eventualidad, se veía que conocía el coche, que nada más salir a pista podía ser competitivo y estar al nivel de lo que el equipo le pedía como son los casos de De la Rosa cuando pilotó para Mclaren o de Gené cuando hubo de suplir a Montoya en Williams amén de otros variopintos ejemplos. ¿Por qué con Di Resta y otros no ocurre eso? Pues son dos motivos muy claros:

El primero de ellos es que son unas víctimas de la reducción de tests para el abaratamiento de los costos. Anteriormente tenían un papel activo y muy importante en cada test. No eran solo reservas, sino que su voz y su hacer en pista era tenido en cuenta para la evolución del coche. A día de hoy pocas pruebas se hacen y las que se llevan a cabo las copan los titulares, por lo que el papel de un piloto reserva queda relegado a un simulador que por muy realista que sea, nunca llegará a ser tan veraz como salir a pista.

El segundo es la escasa confianza que el equipo tiene en ellos. A día de hoy no los ven como alguien a quienes puedan meter a probar en los Libres 1 o dar algunas vueltas en los tests. Los encierran en los simuladores citados en el anterior párrafo y se olvidan de que el tercer piloto tiene que conocer perfectamente el coche y estar en forma por si tiene que pilotar.  Como hemos dicho, cuando Gené, De la Rosa, Salo, Wurz, etc han debido de cubrir suplencias, las hicieron conociendo cada detalle del coche que llevarían y ello auguraba un buen rendimiento. En el último caso de Di Resta sólo hemos visto que por todo lo expuesto se ha enfrentado a todo un monoplaza y unos neumáticos desconocidos, algo que debería ser inadmisible en cualquier equipo. E igual que Di Resta también sufrió Badoer en las dos carreras que reemplazó a Massa en Ferrari. Sí señor, en los 90 Badoer no es que fuera un ducho, pero ni mucho menos era la risión de la parrilla ni el pufo que parecía ser en Ferrari cuando doce años después tomó parte con un coche que apenas pudo tocar.


Conclusión a todo. Los equipos deben empezar a valorar más el desempeño de sus pilotos reservas y darles más kilometraje en pista para que estén en activo. El no conocer el monoplaza y el óxido son sus principales enemigos en caso de tener que volver al ruedo. 

domingo, 30 de julio de 2017

Vettel gana la carrera de los escuderos

Kimi Raikkonen escoltó a Vettel durante más de media carrera facilitándole la victoria (FOTO:Medios oficiales de la Fórmula 1)

Durante todo el fin de semana habíamos visto a los Mercedes y los equipos que montan sus motores sufrir algo más que en otros Grandes Premios. Ferrari, que parecía empezar el principio del fin de su derrota ante los de Brackley, para nada hincaron su rodilla en el suelo y renacen en en Hungaroring poniendo tierra de por medio.

La prueba en general ha sido de protagonismo para esos segundos pilotos, de conversaciones en los muros para las complicadas tomas de decisiones. Desde el principio se veía a una Ferrari por su sitio y los comisarios que parecían ser algo más “tikis mikis” que en otras citas. Lo de Verstappen fue exagerado ante un lance que tendrá que aclararse de puertas para adentro en Red Bull. Sin esos diez segundos de penalización al holandés, tal vez le habríamos visto luchar por la victoria. Pero no ha sido así, y esos mismos comisarios que lanzaron sus cuerdas contra Verstappen no nos privaron del duelo español, ese entre un Alonso y un Sainz que completaban a nivel individual su mejor carrera de la temporada y que dejaban de lado la amistad que les une fuera de la pista para bregar dentro de ella y como no, en los boxes entrando a la par.

Volviendo a la cabeza, Vettel perdía ritmo y Raikkonen pedía paso. No se lo otorgaban dejando patente lo jerarquizados que son desde Maranello con sus pilotos. Priorizaron el gran botín que Vettel debía obtener si quería volver a abrir hueco en la general. Por lo que el trabajo de “Iceman” había de convertirse en clave cuando Hamilton llegaba cuando a él si le habían dado paso sobre Bottas. El británico no pudo ni enseñar su coche al finlandés y cumplió su promesa de dejar el sitio en el cajón para Bottas. Un acto de caballerosidad sí, pero de esa caballerosidad que quién sabe si puede costar cara cuando en Abu Dhabi se cierre el telón lamentando los puntos que le dejaron al bueno de Valtteri.

Hay más ejemplos de escuderos que en este Gran Premio han tenido su papel. Uno de ellos es Jolyon Palmer, que aterrizaba con la espada de Damocles sobre su cabeza. Renault había puesto presión a sus dos hombres durante la semana para puntuar. Ninguno de los dos lo hizo y nadie puede asegurar que Palmer esté en Spa después del parón y con Kubica amenazando su puesto. Pero hizo trabajo de equipo y facilitó el desempeño de Hulkenberg cuando se lo requirieron. La pelota sobre si ha sido esta la última prueba o no de Jolyon está en el tejado de Enstone.

Para finalizar, tampoco podemos pasar por alto el papel de Di Resta. La indisposición repentina de Massa le hizo subirse al Williams tras cuatro años sin competir en Fórmula 1. Cumplió su cometido metiendo al bólido dentro del 107% y bregando con os Sauber hasta que su mecánica le hizo retirarse. 

domingo, 16 de julio de 2017

Drama final en Ferrari y el campeonato patas arriba

Ferrari, incapaz de seguir el ritmo de Mercedes, se hundió en el último giro con los pinchazos de Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen. (FOTO:www.soymotor.com)

Mercedes está progresando por encima de Ferrari en este ecuador de mundial. El merme de puntos de Hamilton hacia Vettel era cuestión de tiempo y la distancia de un solo punto entre ambos ponen al británico como favorito. Y más aún cuando Verstappen, con mejor salida que Vettel y mucha brega para mantener su posición de podio ralentizaba al alemán, haciéndole perder toda esperanza de llegar a la cumbre de la prueba. Vettel tuvo que tirar de undercut para anteponerse al holandés, pero ya era demasiado tarde y la distancia con Hamilton y su compañero Raikkonen se antojaba insalvable.

Si las cosas acababan así, “Seb” se encontraba en disposición de minimizar el daño. Pero todo se le complicó. Bottas hizo una estrategia conservadora al principio para apostar por un final agresivo y que le dio grandes resultados. Vettel para él apenas fue obstáculo ante la facilidad con la que le sobrepasó y el vuelco vino en el último giro. Raikkonen perdía la segunda plaza en favor de Bottas por pinchazo, Verstappen y Vettel corrían la misma suerte en esta conclusión de locura volteando todo en la general.


En resumidas cuentas, sol para Mercedes y nubarrones para Ferrari en un Gran Premio en el que hubo otras cosas dignas de mención, y no nos referimos únicamente a la pantalla protectora probada el viernes y que no acaba de convencer a los pilotos, sino de la actuación de Hulkenberg sacando más partido a una Renault que trata de crecer, la remontada de Daniel Ricciardo y sobre todo, la cruz con la que tendrá que cargar Kvyat al dejar fuera de carrera a Carlos Sainz Jr provocando un segundo incidente después del de hace siete días que costó la retirada de Alonso y Verstappen.  Tal vez esto provoque que en la cúpula de Red Bull le redacten el finiquito a final de campaña.

martes, 11 de julio de 2017

Sainz Jr contra la dictadura Red Bull

Precisamente en territorio Red Bull ha estallado la guerra entre Sainz Jr y la escuadra de Helmut Marko tras las últimas declaraciones del piloto madrileño.

Más que espectáculo en pista, Austria nos ha dado titulares. Desde el cerrojazo de Mercedes y Ferrari a una hipotética llegada de Fernando Alonso al conflicto engendrado entre Carlos Sainz Jr y Red Bull.

Quién sabe si la noticia germinaba durante la semana, pero su eclosión vino el viernes en rueda de prensa.  Algo tan aparentemente baladí como “un cuarto año en Toro Rosso es improbable, mi prioridad es Red Bull” ha levantado una gran polvareda en el seno de las bebidas energéticas propiedad de Dietrich Mateschitz. Y es cierto, nadie ha tenido nunca ese cuarto año en Toro Rosso. ¿Por qué interesa tanto ahora mantener tanto a Sainz como a Kvyat? Muy sencillo, a excepción de Pierre Gasly, poco o nada tienen a corto plazo dentro de su programa y subir a Niko Kari cuando el prometedor finés se encuentra estancado en el inicio de temporada de GP3 y aún no sabe lo que es puntuar suena cuanto menos precipitado e irreal.

Las declaraciones de Sainz Jr son una declaración de intenciones. O bien es sabedor de que tiene ofertas de cara a 2018 o simplemente acaba de tirar un órdago a la grande a esos jefes que se han puesto nerviosos en demasía. Le recuerdan su contrato de cara a 2018, ese mismo papel que ahora les parece una biblia escrita y que no dudaron en romper arruinando la carrera de pilotos como Jaime Alguersuari o ninguneando a Sebastian Bourdais. Tal vez Sainz sabe lo que le hicieron a Alguersuari, el descenso al ostracismo de Buemi recuperado por ser uno de los punteros en Fórmula E, la humillación a Kvyat la campaña pasada, etc. Todo vale en la casa autoritaria del “harás lo que se te diga y no chistes”.


“No muerdas la mano de que te da de comer” añadiendo Christian Horner el “sin nosotros no estaría en la Fórmula 1”. Pues me van a perdonar ustedes señores de Red Bull, pero ustedes siempre han sido muy selectivos a la hora de acoger a sus promesas, les han exigido todo en categorías de base, les han metido en duelos entre sí dentro de la misma categoría y podemos hacer una larga lista de nombres que ustedes han ido dejando en la cuneta por no responder a las expectativas. El de Carlos Sainz no es uno de ellos y si ha llegado hasta donde ha llegado es por pura y dura meritocracia. A pesar de ello para ustedes señores de Red Bull, Sainz Jr ha sido poco menos que un segundón a sus ojos. Él ganó las World Series y aún así prefirieron subir al recién fichado Max Verstappen que aún con talento, no tenía palmarés en monoplazas y solo un año de experiencia en Fórmula 3. Ustedes no sabían qué hacer con el madrileño y gracias a la firma de Vettel por Ferrari tuvo el hueco que a pulso se ganó. Sí, estuvo a punto de ser un nombre denostado por su política como lo han sido Alex Lynn y muy recientemente el Pierre Gasly que ahora se pierde por tierras japonesas después de cumplir sobradamente sus requisitos. Así que no hablen como los salvadores de Carlos Sainz, como los señores a los que todo se lo debe porque no es así. Y si no quieren dejar volar a Carlos valoren si les conviene sentarlo en el banco con contrato en vigor pagando un sueldo más o pagar el finiquito de su salida mientras consigue puntos para otra escuadra que es rival directo de ustedes. 

domingo, 9 de julio de 2017

Bottas gana por una vuelta

Probablemente una vuelta más hubiera cambiado el desarrollo de la prueba. Pero Bottas aguantó el tirón final de un Vettel que afianza su liderato (FOTO: www.gpudpate.net)

Las pequeñas gotas de la mañana dejaron paso a un cielo de nubes y claros con alguna gota dispersa al final. La opción de lluvia era casi nula pero no así un principio y final de carrera un tanto movidos.

Empezamos por la salida. Como bien dice Alonso, “Kvyat ha jugado a los bolos” arruinando la carrera del asturiano y lo que es peor a los ojos de Red Bull. La de Max Verstappen, por lo que no sabemos si esa imagen y además en casa le puede costar cara al piloto ruso al final de campaña. El otro tema es la salida de Bottas, investigada por posible anticipación pero las imágenes no permiten aclarar al cien por cien la situación, si bien parece que el finés arranca en el momento clave y les roba la cartera a todos al límite del reglamento pero de manera legal.

De Hamilton, que había partido octavo por la penalización de cinco posiciones al sustituir caja de cambios, estaba llamado a poner el espectáculo en carrera, pelear con mucha hambre tras la polémica de Baku sin sanción a Vettel y con ganas de remontar al estilo Turquía 2006 cuando acariciaba el campeonato de GP2. Pero nada más lejos de la realidad. El Hamilton que se observó hoy fue un Hamilton apagado, sin el “Hammertime” activado  y teniendo que remontar el base a estrategia una vez había caído en el juego de Raikkonen cuando “Iceman”, en colosal trabajo de equipo, le frenaba permitiendo a Vettel no tener que observar en su retrovisor mancha plateada alguna. Quizás el británico pueda rozar el aprobado con el final ante Ricciardo, apretando lo que no apretó en las 70 vueltas anteriores para lanzarse a por un podio en que no pudo estar presente. Más merecedor de ese cajón ha sido la consistencia del australiano durante toda la prueba, tan consistente como Grosjean, que a la chita callando arranca un buen botín para Haas con su sexta plaza y aunque poco se hable de él, su carrera es cuanto menos digna de mención.


Volvemos a hablar de Bottas, sí, ese que parecía disfrazado de Hamilton durante los primeros ¾ de carrera para al final sucumbir a la hoy alta degradación de los neumáticos. Victoria merecida para el de Mercedes pero no sin ese halo de suspense cuando Vettel había conservado mejor sus gomas y en el último giro comprometió su triunfo. Su titular en el post-carrera es “Aún estoy en la lucha por el campeonato”. En otras palabras, ya no le vale con ser el segundo de Hamilton que suma puntos vitales para Mercedes, quiere más, mucho más. 

domingo, 2 de julio de 2017

Fernando Alonso, en el epicentro del mercado

En los últimos días, y con previsión de una “Silly Seasson” un tanto movida, Fernando Alonso está en boca de Ferrari para un posible regreso (FOTO: www.thebestf1.com)
El mercado de pilotos de cara a la próxima temporada está en su punto de ebullición. Fernando Alonso predijo un mercado muy agitado, con sorpresas y por ese camino marchan las cosas.

El nombre que está en boca de todos es precisamente el de Fernando Alonso. Él quiere un proyecto ganador ya, algo que Mclaren no le puede ofrecer e incluso las relaciones con Honda se han tensado al culparle desde Japón de su divorcio con la escudería de Woking. Flavio Briatore ha alimentado más la “bicha” abriendo las puertas de su regreso a Ferrari, que esta vez si se encuentra en vía ganadora y fuera del equipo el mismo Marco Mattiacci con el que no guardó buenas relaciones. Un regreso que aunque se apunte como sustituto de Raikkonen, no está tan clara esa premisa a sabiendas de que le tocaría compartir box con otro gallo en un equipo que siempre ha definido un primer y segundo espada con mucha claridad. El caso es que Hamilton ha insinuado posibilidad de retirada y marcarse otro Rosberg a final de año, y en Italia ya hablan de que Vettel ha firmado un precontrato con Mercedes, algo que allanaría el camino de regreso a Maranello del asturiano con la incógnita de quién sería su compañero si Raikkonen también opta por colgar el casco. Se podría barajar la opción del fichaje de Ricciardo, “ascender” a Grosjean o arriesgar con su joya que despunta en Fórmula 2. Hablamos sí, de Charles Leclerc.

Si en Mercedes suenan tibias voces de retirada de Hamilton, Vettel se perfilaría como el recambio si de verdad existiera ese precontrato firmado por ambas partes, pero hay un nombre a tener en cuenta y que nadie ha metido en la ecuación. Hablamos de Max Verstappen, la gran promesa actual llamada a ser campeón del mundo a corto plazo. Mercedes ya le tentó cuando estaba en Fórmula 3 y no sería descartable que le lanzara la caña si Red Bull no progresara. Bottas finaliza contrato y está cumpliendo su cometido, por lo que lo lógico sería pensar en su renovación aunque podrían ver a Ocon con diferentes ojos por su buena etapa en Force India.

Si en Red Bull alguno de los contendientes cambia de aires, Carlos Sainz Jr estaría en la pole para ese volante y Gasly debería ser su sustituto natural en Toro Rosso. Eso sí, al español podrían salirle otras novias en Renault o Mclaren.

Force India es el equipo que más dudas nos deja en cuanto a qué ocurrirá con ellos. Aún con las tensiones recientes entre Pérez y Ocon, han encontrado un equilibrio cuasi tan bueno como cuando tenían a Hulkenberg en sus filas. Todo ello podría saltar por los aires si Ocon es reclamado por Mercedes y Pérez se planteara aceptar una posible oferta de Renault. Quizás Mercedes podría compensar al equipo indio con un intercambio Bottas-Ocon.

Williams ha pasado de ver la retirada en falso de Felipe Massa a su posible continuidad en 2018. Stroll está encontrando su sitio y es la escuadra menos probable para un intercambio de cromos a no ser que Bottas valorara su regreso a Hinwill si no es renovado en Mercedes.  

Haas también es otro equipo con muchas incógnitas y donde Ferrari puede meter a sus jóvenes promesas. Grosjean es el que menos enteros tiene para vestirse de rojo el próximo año sin ser descartable su nombre. Magnussen tampoco se sabe a ciencia cierta qué hará y en la recámara estarían los nombres de Giovinazzi y Leclerc.

La Renault en formación es otra escuadra bastante apetecible para los pilotos. Hulkenberg continuará salvo sorpresa mayúscula y Palmer, con dos paupérrimas campañas en su haber, tiene pie y medio fuera del equipo. Las opciones más sonadas son Sainz Jr y Pérez sin cerrar la puerta al regreso de Grosjean a la que ha sido su casa. Kubica ha probado recientemente un Renault de 2012 tras su accidente en rallies y las sensaciones que ha tenido no han sido malas, pero se antoja hipotético su regreso al Gran Circo.

La lógica nos habla que en Mclaren se debería dar continuidad a la apuesta hecha por Vandoorne. Y con Alonso más fuera que dentro de Woking, Sainz Jr y la vuelta de Button son las opciones más viables y probablemente las únicas.


El último equipo a analizar es Sauber. Será motorizado por Honda y eso puede cambiar muchos planes como dejar fuera de la Fórmula 1 a Pascal Wehrlein contra todo pronóstico pudiendo prescindir de Marcus Ericsson. Los japoneses querrán al menos a un hombre de su confianza y el nombre de Button habría que tenerlo en cuenta al igual que el de Nobuharu Matshushita. 

martes, 27 de junio de 2017

Vettel y Hamilton emborronan Bakú

El choque deliberado entre Hamilton y Vettel durante el periodo de Safety Car dará que hablar durante varias semanas

Sin duda es el tema candente de la semana entrante. Bakú nos ha dejado la carrera más loca en lo que llevamos de año, muy lejos del tostón del estreno en 2016 y un debate que perdurará como mínimo hasta dentro de dos semanas cuando nos encaminemos al Red Bull Ring de Spielberg.
La prueba apenas había llegado al ecuador y nos encontrábamos en uno de los sucesivos periodos de Safety Car y Hamilton, tras su pole 66 lideraba. Fue entonces cuando decidía ralentizar el ritmo para dar el tirón y ahí Vettel impactó con su morro sobre la parte del difusor del Mercedes. El alemán iba caliente y se emparejó a él para golpearle. Fin del buen rollo entre ambos y toca repartir culpas, unas culpas donde mojándonos un poco se las damos más a Lewis Hamilton. De todos es sabido que su afán por ralentizar el ritmo cuando va a finalizar el periodo de Coche de Seguridad y eso ya provocó un accidente entre el mismo Vettel y Webber en el Gran Premio de Japón 2007. Sin duda para muchos, una provocación en toda regla del que ahora se piensa el sucesor de Ayrton Senna y en la que Vettel cayó en un acto sin poca justificación. Tal vez deberían empezar a mirarse muchas cosas como la normativa tras el Safety Car o sancionar a ambos en el post-carrera. Cosa que no se hizo.

El otro debate se centra en la tensión que viven los dos pilotos de Force India desde Canadá. Esta vez ambos colisionaron al bregar la posición y probablemente, tal como transcurrieron los acontecimientos, no sólo tiraron un podio seguro, sino una más que probable opción de victoria.
Ese incidente quitó el protagonismo a la carrera más eliminatoria del año, esa donde Bottas, aunque ayudado por los Safety Car, se ganó una vez más la renovación con las balas plateadas al remontar desde atrás hasta el podio después de chocar con Raikkonen en la salida. Ricciardo carrera de menos a más tras problemas en los boxes y qué decir de Lance Stroll. El chico está cogiendo moral y se ha rehecho a las mil maravillas de un inicio de temporada desastroso. En el Gilles Villeneuve se creyó que podía hacer algo y lo de Baku debe ser algo más que esa bocanada de aire fresco para demostrarle al bueno de Frank Williams que está listo para asumir el reto que le han encomendado.


También carrera consistente para los dos españoles entrando en los puntos. Siempre ajenos a los terremotos que la prueba reservaba a todos y bien al intentar defender sus respectivos lugares, llevando especialmente alegría al asturiano con la inauguración del casillero de Mclaren

domingo, 18 de junio de 2017

Porsche ante la rebelión de los LMP2

El Porsche número 2, pilotado por Timo Bernhard, Brendon Hartley y Earl Bamber ha ganado unas trepidantes 24 horas de Le Mans, teniendo que bregar con el LMP2 número 38 de Jackie Chan Racing (FOTO:www.gtspirit.com)

En esta edición, Toyota lo tenía todo para resarcirse del batacazo de 2016. Habían preparado la carrera muy a conciencia y Kamui Kobayashi hizo la pole con record del circuito incluido. Ese dominio se ratificó en las primeras horas de la prueba. Ese Toyota número 7 controlaba y mantenía distancias que apenas bajaban del medio minuto y subían del primero ante unos Porsche que empezaban a tener problemas mecánicos. Uno quedaba fuera y el a la postre ganador tenía que estar una hora en boxes para repararse, perdiendo a priori las opciones de vencer.

El calor no iba a ser ajeno a las mecánicas, y la hecatombe de Toyota llegaba con la caída de las horas nocturnas. Ese prototipo, que dominaba a placer se paraba y previamente a eso el Toyota de Buemi, Nakajima y Davidson entraba en boxes por problemas con los frenos, sin poder partir nuevamente hasta la 1 de la madrugada.  El tercer Toyota también sufría todas las desgracias posibles y adiós a la carrera para ellos. Porsche, que se había visto en un Sandwich nipón gran parte de la carrera, pasaba a liderar con el prototipo número 1. La competencia no era feroz para él, a su estela, y metiéndole varias vueltas hasta llegar casi a las 20, se situaban los LMP2. Unos LMP2 dispuestos a cobrar su cuota de protagonismo no sólo por verse en un podio inesperado para ellos, sino que el inhóspito  abandono del Porsche 1 en el que brillaban Neel Jani, Andre Lotterer y Nick Tandy daba un vuelto descomunal a la carrera. Un LMP2 se posicionaba para  un histórico triunfo al equipo al que Jackie Chan daba nombre Ho Ping Tung, Thomas Laurent y Oliver Jarvis debían ser un manojo de nervios tanto en el prototipo como en el box cuando tocaban los descansos entre relevo y relevo.

Por detrás, la remontada del Porsche número 2 empezaba a cinco horas del final, se le veía desatado y rozó las barreras en un doblaje como muestra de que creían en la épica después de todo lo que les había ocurrido. A una hora de la conclusión de la carrera, el sueño de Jackie Chan de hacer una gesta para recordar acababa y se conformaban con el nada desdeñable premio de vencer en LMP2 de manera autoritaria.

En la primera categoría de GT sin duda vimos la prueba más igualada. Las marcas que se peleaban eran de lo más variopinto sin que ningún equipo fuera claro dominador. Ferrari con su AF Corse, Ford y Porsche conservaron sus opciones durante las casi 24 horas de la prueba, pero fue el Corvette de Antonio García, Jan Magnussen y Jordan Taylor el que nunca se puso nervioso en carrera. En el anochecer llegaron a ocupar la duodécima posición y se notó la experiencia de este triunvirato ascendiendo poco a poco hasta en los últimos giros, con una parada memorable en boxes entre Aston Martin y Corvette. Los amarillos salían delante en el relevo final. Un relevo cuanto menos cuestionado al ser Jordan Taylor el que lo hiciera dejando en boxes la experiencia y calidad de Antonio Garía y Jan Magnussen.  De hecho, el Aston Martin de Jonathan Adam presionó y llegó a tener un toque con el Corvette que le dejaba virtualmente fuera de la opción de victoria en GT. Pero ahí, un error del americano marchándose por la puzolana y dañando el Corvette en el tramo decisivo hizo que Adam no dudara en meterle el coche e imponerse.


GT Amateur tampoco estuvo exento de emoción. El equipo JMW Motorsport motorizado por Ferrari ganaba con el coche que conducían Robert Smith, Will Stevens y Dries Vanthoor. Pero Aston Martin también era favorito en esta categoría y con Paul Dalla Ana al volante del número 98, sufrían un reventón cuando iban primeros.